Fotografía natural y cinematográfica, sin poses ni artificios. Solo vosotros y lo que de verdad se siente.
Detrás de cada fotografía estamos nosotros, con la misma ilusión que lleváis vosotros al altar.
Nos implicamos desde el primer mensaje porque no creemos en las bodas en serie, sino en historias únicas contadas con sensibilidad y alma.
No os pediremos que actuéis. Solo que os dejéis llevar. Observamos sin interrumpir y capturamos lo que realmente sucede. Lo real no se repite, pero sí puede revivirse.
Porque no se trata solo de hacer fotos, sino de cómo os sentís mientras las hacemos.
No soís modelos. No tenéis por qué saber posar. Y tampoco hace falta. Cuando hay confianza, la cámara desaparece y aparecen las miradas, los abrazos, las risas nerviosas y esa forma única que tenéis de estar juntos
No se trata de ver cómo fue la boda, sino de volver a sentirla. Ese abrazo, ese instante que pasó volando. Las fotos no deben mostrar solo el día, deben transportaros al momento exacto en el que sucedía.
Cada pareja tiene su estilo, su sensibilidad, su forma de quererse. Por eso miraros con los ojos que merecéis, con respeto, con cuidado y con una mirada que os entienda sin palabras.
Somos Alba y Silvia, dos amigas que comparten una mirada. Nos apasionan los detalles, la luz natural y todo lo que ocurre sin que nadie lo fuerce.
Vosotros vivís vuestro día, nosotras lo capturamos como fue. Observamos sin interrumpir, acompañamos sin dirigir.
Y después, os lo devolvemos en forma de recuerdos que no solo muestran, sino que os hacen volver a sentir.
Cada imagen que entregamos está hecha con la misma emoción con la que se vivió.
Solo tenéis que rellenar el formulario. Es rápido y fácil. En cuanto lo recibamos, os escribiremos para confirmar si tenemos la fecha libre y charlar un poco más sobre vuestra historia.
Sí. Son opcionales, pero muy recomendables. La preboda nos ayuda a conocernos y a romper el hielo. Y la postboda es ideal para tener imágenes más relajadas en un entorno que os encante.
Cuanto antes, mejor. Especialmente si vuestra boda es en temporada alta (de mayo a octubre), ya que esas fechas vuelan. Aunque siempre podéis preguntar, a veces hay suerte.
Nuestro estilo es documental y cinematográfico. Capturamos lo que sucede sin interferir. Buscamos luz natural, composiciones cuidadas y emociones reales. Sin artificios, sin guión.
Queremos conocer vuestra historia desde el principio. Y para empezar con buen pie, os regalamos una noche de hotel donde seguir soñando juntos.